4 enmascarados raptan al director de una sucursal bancaria de un pueblo cualquiera. Lo meten en una furgoneta y le piden 90.000 euros de su propio bolsillo. Intentando escurrir el bulto el directivo les dice que no tiene ese dinero, pero los violetos enmascarados saben que si lo tiene, y además saben donde está; en su casa, hacia donde va la furgoneta.A medio camino la furgoneta se estropea, superados por las circunstancias, se sacan las máscaras y por primera vez vemos a los temibles captores que luchan por recuperar el dinero que les estafaron.