En Málaga, una anciana mujer (Mari Paz Redoli), antaño pintora y ahora desengañada en su vejez, en un paseo junto a sus nietos en Málaga, se le aparece ante sus ojos una risueña niña (Candela Triguero), cuya sonrisa le evoca recuerdos de los antiguos colores y el antiguo sentir de un pincel y un lienzo entre sus dedos, entonces se decide a averiguar que mensaje intenta transmitirle esa misteriosa niña en ese paseo por la ciudad de Málaga y la hermosura de su mar azul.